Las pulseras de actividad son un tipo de dispositivo que surgió como una alternativa a los smartwatches, pensada para los usuarios que no necesitaran funcionalidades tan avanzadas, pero que quisieran llevar un control de su actividad física. Por ello, es fácil confundir las pulseras de actividad con los relojes inteligentes, cuando no son lo mismo. En este artículo, comparamos las características más importantes de dos de las pulseras de actividad más avanzadas del momento: Fitbit Charge 6 vs Garmin Vivosmart 5.
Estéticamente, son dos pulseras muy similares entre sí, con la diferencia de que se pueden comprar en colores distintos. La Fitbit Charge 6 es un poco más grande, algo que se nota en el tamaño de su pantalla. Esta, además de ser de mayor tamaño, tiene tecnología AMOLED, mientras que la pantalla del Garmin Vivosmart 5 es OLED. Otra de las diferencias más relevantes entre los dos modelos es el rendimiento deportivo. Mientras la pulsera de Fitbit cuenta con 40 modos deportivos integrados, la de Garmin tiene unos 15. Además, una de las dos tiene el GPS integrado, mientras que otra necesita conectarse al smartphone para utilizar GPS.
En lo que respecta a las métricas de salud, la Fitbit Charge 6 adquiere cierta ventaja porque es la única de las dos pulseras que incluye un sensor ECG. Sin embargo, también hay similitudes entre ellas. Por ejemplo, las dos pulseras de actividad pueden durar hasta 7 días, aproximadamente, con una única carga. Y, si quieres utilizarlas con smartphones iOS o Android, puedes hacerlo en ambos casos.
Para tener una idea más clara sobre qué pulsera de actividad es más adecuada para ti, te animamos a leer detenidamente esta review.
Tabla comparativa |
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|---|---|
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Fitbit Charge 6 |
Vivosmart 5 |
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Dimensiones |
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| 38,7 x 18,6 x 11,7 mm | 19,5 x 10,7 x 217 mm |
Peso |
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| 30 g | 24,5 g |
Colores |
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| Negro, porcelana y coral | Negro, blanco y verde menta |
Tipo de pantalla |
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| AMOLED | OLED |
Tamaño de pantalla |
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| 1,04 pulgadas | 0,84 pulgadas |
Resolución |
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| 260 x 170 píxeles | 88 x 154 píxeles |
Autonomía |
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| 7 días | 7 días |
Tiempo de carga |
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| 2 horas | 1,5 horas |
Tipo de cargador |
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| Magnético | De enchufe |
Resistencia al agua |
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| Hasta 50 metros | Hasta 50 metros |
Frecuencia cardíaca |
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| Sí | Sí |
Saturación oxígeno sangre |
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| Sí | Sí |
Nivel de estrés |
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| Sí | Sí |
Control del sueño |
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| Sí | Sí |
Ciclo menstrual |
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| Sí | Sí |
ECG |
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| Sí | No |
Modos deportivos |
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| 40 | 15 |
GPS |
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| Sí | Sí, conectado |
Sensores |
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| Acelerómetro, temperatura corporal, luz ambiental y escáner EDA | Acelerómetro, sensor de luz ambiental, pulsioximetría y monitor de frecuencia cardíaca |
NFC |
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| Sí | No |
Conectividad |
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| Bluetooth | Bluetooth Smart y ANT+ |
App móvil |
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| Sí | Sí |
Compatibilidad |
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| Android 9.0 o superior, iOS 15.0 o superior | iPhone y Android |
Tamaños de correa |
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| 2 | 2 |
El tamaño de la pantalla es la principal diferencia estética
A primera vista, lo cierto es que las Fitbit Charge 6 y Garmin Vivosmart 5 parecen la misma pulsera de actividad. La principal diferencia radica en el tamaño de la pantalla, que se nota más grande en la pulsera de Fitbit. Primero, porque ocupa todo el ancho de la pulsera, a diferencia de la pantalla del modelo de Garmin. Esto hace que la pantalla del Fitbit Charge 6 mida 1,04 pulgadas, mientras que la de su rival no llega a medir 0,9 pulgadas.
Y, además, hay que destacar que la pantalla de la pulsera de Fitbit tiene tecnología AMOLED, lo que le confiere una resolución mayor que la tecnología OLED de la pantalla de Garmin. Más allá de esta cuestión, cabe destacar que las dos pulseras se pueden adquirir en distintos colores, y tienen dos tamaños de correa disponibles según el diámetro de tu muñeca.
Misma autonomía y tiempo de carga
En lo que respecta a la duración de la batería, nuestras dos protagonistas son prácticamente iguales. De hecho, las dos pueden funcionar durante una semana, aproximadamente, con una sola carga. No obstante, ya sabes que la autonomía depende de cómo optimicemos el uso de la pulsera. Por otro lado, las dos se cargan en un tiempo que oscila entre 1,5 y 2 horas, así que la diferencia tampoco es mucha en ese sentido.
Medición de la salud: ligera ventaja para Fitbit
Llegamos a uno de los aspectos en los que más interés suelen mostrar los usuarios: el control de la salud. Lo primero que destacamos es que las dos pulseras miden los parámetros básicos, como la frecuencia cardíaca, la saturación de oxígeno en sangre o el nivel de estrés. También registran el tiempo de sueño y pueden llevar un control de la menstruación. Sin embargo, la pulsera de Fitbit tiene una pequeña ventaja en el ámbito de la salud.
Concretamente, el sensor ECG que lleva incorporado. Este sensor (electrocardiograma) permite detectar si sufres alguna anomalía en lo que respecta a la frecuencia cardíaca. Es decir, lleva un paso más el análisis de este parámetro y, en caso de detectar fibrilaciones auriculares, te avisa. Además, también está equipada con un sensor de temperatura corporal que el Garmin Vivosmart 5 no tiene.
¿Cómo es su rendimiento deportivo?
Otro de los usos más habituales de las pulseras de actividad es el seguimiento de la actividad física y deportiva, y aquí también destaca Fitbit por encima de Garmin. En realidad, la diferencia radica en que la Fitbit Charge 6 puede registrar hasta 40 modos deportivos diferentes. En cambio, la Garmin Vivosmart 5 tiene 15 modos integrados. Eso sí, las dos pulseras tienen una resistencia al agua que les permite sumergirse hasta 50 metros, así que tienen el mismo rendimiento si practicas natación.
Conectividad y compatibilidad con otros dispositivos
Veamos cuáles son las diferencias más importantes en lo que respecta a conectividad y sincronización con otros dispositivos. En realidad, tanto la Fitbit Charge 6 como la Garmin Vivosmart 5 se pueden conectar tanto con smartphones iOS como Android. Una de las diferencias más significativas es que la pulsera de Fitbit lleva GPS integrado, lo que le permite funcionar sin necesidad de sincronizarse con el móvil en caso de que quieras utilizar esta función. Por su parte, la pulsera de Garmin se puede utilizar con GPS, pero siempre y cuando esté conectada con el smartphone, no por sí sola.
Por otro lado, solamente la Fitbit Charge 6 es compatible con la tecnología NFC, así que solo puedes realizar pagos sin contacto con esa pulsera. Y, si nos fijamos en las opciones de conectividad, cabe destacar que ambos modelos tienen Bluetooth, que Garmin complementa con la tecnología ANT+.
¿Cuál es la mejor pulsera de actividad?
Tras haber analizado en detalle las prestaciones de las dos pulseras de actividad, nuestra conclusión está bastante clara. Sobre todo, después de comprobar que las dos pulseras tienen, prácticamente, el mismo precio. La Fitbit Charge 6 es una pulsera de actividad más completa, que nos parece que merece la pena por pocos euros más. En general, es una pulsera diseñada para ofrecer una medición más precisa tanto de las opciones de salud como del rendimiento deportivo, mientras que la pulsera de Garmin reporta datos más sencillos.
Si la diferencia de precio fuera menor, quizá pensaríamos más hasta qué punto utilizaríamos los informes más detallados que ofrece la Fitbit Charge 6. Pero, por casi el mismo precio, tenemos una pulsera mucho más completa, independientemente de que aprovechemos sus ventajas más o menos. De hecho, cuando hay alguna oferta económica en la Garmin Vivosmart 5 que amplía esa diferencia, sí es conveniente reflexionar sobre si realmente vas a exprimir las prestaciones de la Fitbit, porque en ese caso sí te podría interesar quedarte con la pulsera de Garmin.
En definitiva, la decisión dependerá del precio de venta que encuentres en cada momento y de cuáles sean tus necesidades principales que te han llevado a compra runa pulsera de actividad.