Garmin Edge 530 vs 830 vs 1030 Plus – ¿Quieres aumentar tu rendimiento?

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Salir a hacer deporte con la bici es uno de los deportes con más adeptos hoy en día, porque te permite disfrutar de la naturaleza a la vez que trabajas todo el cuerpo y entrenas. Los aficionados al ciclismo suelen contar con su equipamiento específico que les ayuda a optimizar su rendimiento y aprovechar al máximo todos los datos que puede ofrecer la tecnología para mejorar. Uno de los aparatos que no puede faltar es el ciclocomputador, y en este artículo te mostramos las diferencias entre tres que son de la misma marca: Garmin Edge 530 vs Garmin Edge 830 vs Garmin Edge 1030 Plus. 

Un ciclocomputador es un dispositivo electrónico capaz de medir todos los parámetros que prefieras cuando vas en bici, desde la distancia, la velocidad o el tiempo, entre otras cosas. Se instala en la propia bicicleta y monitoriza toda la información que, posteriormente, queda registrada. De esta forma, es más fácil comprobar cuáles son los datos específicos que hacemos durante el entrenamiento, y nos permite marcarnos nuevos objetivos que nos ayuden a mejorar dichos registros.

Y, si hay una marca líder en equipamiento deportivo, es Garmin. Por lo tanto, los ciclocomputadores no pueden faltar en su catálogo. Pero, ¿sabes cuál es el más interesante de toda su gama? En este artículo te mostramos las diferencias entre tres modelos de los cuales dos de ellos son muy similares entre sí, mientras que hay uno que difiere del resto en más prestaciones. Una de las diferencias más patentes es el tamaño de la pantalla, aunque el Garmin Edge 1030 Plus cuenta con más innovaciones tecnológicas que sus rivales. ¿Quieres saber cuáles? ¡Te las contamos!

La pantalla, lo que primero se ve

A simple vista es fácil darse cuenta de que la pantalla es una de las diferencias más perceptibles. En el caso de los Garmin Edge 530 y 830, no hay diferencias en lo que respecta al tamaño, pues en ambos casos es de 2,6 pulgadas. También tienen la misma resolución, 246 x 322 píxeles.

En cambio, la pantalla del Garmin Edge 1030 Plus eleva su tamaño hasta las 3,5 pulgadas, y eso hace que el ciclocomputador sea más grande que sus dos hermanos pequeños. Consecuentemente, se incrementa la resolución.

Lo que sí tienen en común las tres pantallas es que son a color, aunque solamente las de los Garmin Edge 830 y 1030 son táctiles; el Garmin Edge 530, por su parte, no tiene pantalla táctil, sino que dispone de botones.

Duración de la batería, otra diferencia

Además de la pantalla, hay otra característica en la que el Garmin Edge 1030 plus difiere de los 530 y 830, la duración de la batería. En los dos ciclocomputadores más pequeños puede durar hasta 20 horas, mientras que en el Garmin Edge 1030 plus, la duración aumenta hasta 24 horas.

No obstante, esto depende también del uso que hagamos a título individual, así como de las aplicaciones y funcionalidades que mantengamos activadas. Por ejemplo, los tres ciclocomputadores tienen la opción de activar el modo ahorro de energía, lo que permite optimizar mucho mejor la autonomía de la batería.

¿Cómo es la navegación?

No cabe duda de que una de las principales cualidades en las que nos fijamos a la hora de elegir un ciclocomputador es su comportamiento ante la navegación y la capacidad para planificar e interpretar rutas. En este sentido, los Garmin Edge 830 y 1030 plus están un nivel por encima del 530. ¿Por qué? Porque pueden calcular la ruta que estamos haciendo a tiempo real, mientras que en el Garmin Edge 530, debemos descargar las rutas de forma anticipada, y esto da menos lugar a la improvisación. De hecho, te muestran mapas de calor basados en los datos que han aportado otros ciclistas, lo que te permite hacerte una idea de la intensidad de cada tramo del recorrido.

Más allá de esta diferencia, los tres ciclocomputadores cuentan con funciones interesantes como la capacidad de volver al punto de inicio, las indicaciones giro a giro o la aplicación TrailForks, con la que puede llevar a cabo un seguimiento más exhaustivo y detallado sobre el recorrido.

Analicemos las funciones de entrenamiento

Los ciclocomputadores no solo te ayudan a conocer cuánta distancia recorres o a qué velocidad, sino cuántas calorías consumes o cómo puede tu cuerpo soportar mejor las condiciones de calor y humedad de cada ruta. Puedes consultar los últimos registros de cada entrenamiento y los indicadores de rendimiento. Los tres ciclocomputadores disponen del sensor VO2 Max, para medir la saturación de oxígeno en sangre. Además, puedes sincronizar las sesiones de entrenamiento de Training Peaks con la comunidad virtual de Garmin Connect.

Ahora bien, el Garmin Edge 1030 plus cuenta con algunas innovaciones que van un paso más allá. Es el caso del asistente que te avisa sobre cuándo es conveniente parar a beber durante la ruta, o el servicio de mensajería en grupo con el que puedes comunicarte con otros usuarios y compartir datos de vuestros entrenamientos.

Más capacidad de almacenamiento, pero misma resistencia

Los ciclocomputadores 530 y 830 de Garmin cuentan con una memoria interna de 16 GB, que suele ser suficiente para almacenar las rutas que se suelen hacer a nivel aficionado. Sin embargo, el Garmin Edge 1030 plus duplica esta capacidad y la eleva hasta los 32 GB, lo que se traduce en más aplicaciones y rutas guardadas.

En lo que respecta al grado de resistencia, es el mismo en los tres casos, IPX7. Esto significa que los tres ciclocomputadores tienen una alta resistencia al agua, pero no al polvo. Eso sí, particularmente, encontramos algo más práctica la pantalla de botones en los días de lluvia, ya que la interfaz táctil responde peor cuando llueve. La del 1030 plus mejora algo en este sentido con respecto a la del 830, pero, aún así, si llueve mucho, es más práctico recurrir a los botones. Menos tecnológico, pero más funcional.

Garmin Edge 530 vs 830 vs 1030 Plus: ¿Cuál es nuestra conclusión?

Después de analizar las diferencias y las similitudes entre los tres ciclocomputadores, hemos de reconocer que esperábamos más cambios. Sobre todo, entre los Garmin Edge 530 y 830, puesto que, entre ellos, las diferencias se reducen a que solo uno tiene pantalla táctil y dispone de algunas mejoras en cuanto a navegación.

No obstante, el Garmin Edge 1030 plus sí presenta más diferencias e innovaciones tecnológicas que le convierten en la mejor opción si practicas ciclismo de manera más avanzada. También nos parece la alternativa ideal si sueles salir en grupo, porque permite interactuar mucho más con otros usuarios, y dispone de funciones avanzadas que te ayudan a mantenerte cerca del grupo. Además, tiene más autonomía y más capacidad de almacenamiento interno.

Y, contra lo que al principio puede parecer, no tiene una diferencia económica abismal con respecto al Garmin Edge 830. O, al menos, no tiene tanta como habríamos esperado. Pero, si tu presupuesto está más limitado, puedes optar por el Garmin Edge 530 o por el 830, que son más parecidos entre sí. La elección va a depender, sobre todo, de si prefieres una pantalla táctil o no, pero en cuanto a funcionalidades, tienen prácticamente las mismas.

Por lo tanto, piensa en cuál va a ser el uso mayoritario que vas a hacer del Garmin Edge y, en base a eso, escoge el que se ajuste mejor a tus preferencias de búsqueda y a tus necesidades. Lo que sí te aseguramos es que cualquiera de ellos ofrece resultados satisfactorios. Y es que, como ya sabes, Garmin es Garmin, y siempre es sinónimo de calidad.